El doble homicidio de los policías Cristian Marcelo Peralta y Sergio Páez González causó una profunda conmoción dentro de la fuerza. Autoridades del área de Seguridad y de la plana mayor de la Policía expresaron su dolor y preocupación por lo ocurrido.
Las primeras declaraciones fueron emitidas en la mañana por el jefe de la Policía, el comisario José Díaz. “Los han ejecutado; la Policía está de luto. Estamos acompañando a las familias de los efectivos”, manifestó antes de retirarse del hospital Padilla, a donde había sido derivado desde el Centro de Salud el sargento primero Peralta.
“Estas personas volvieron a demostrar que no tienen miedo de matar a cualquiera”
Con respecto a los detalles del terrible suceso, Díaz expresó: “Estamos investigando. Lo que sabemos es que los policías le dieron la voz de alto a un sospechoso, que les disparó con un arma de fuego de alto calibre. Son varias las vainas encontradas”.
También el ministro de Seguridad, Claudio Maley, llegó a ese nosocomio en la mañana. “Este hecho es tan grave que nos da las exigencias para generar acciones para contrarrestar esta situación”, expresó el funcionario provincial.
Una cámara de seguridad habría captado a la camioneta en la que circulaba el presunto homicida
La gravedad de lo ocurrido motivó que incluso el gobernador Juan Manzur se manifestara al respecto. “Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias”, aseguró después de reunirse con Maley para evaluar la situación generada en la fuerza por el asesinato de los dos efectivos.
El mandatario indicó que puso a disposición de la Justicia “todos los elementos necesarios para el esclarecimiento de este doloroso hecho”.
Dolor en el sepelio
Por la tarde, los jefes policiales, comisarios Díaz y Francisco Picón, se presentaron en la sala velatoria del pasaje Padilla primera cuadra, donde los dos uniformados asesinados fueron velados en las salas ubicadas en el primer piso. Ingresaron en silencio y sin realizar declaraciones periodísticas.
La reconstrucción del crimen de los policías: cómo actuó el homicida
Los cuerpos fueron trasladados en la tarde desde la morgue del Poder Judicial, cerca de las 17.
Compañeros de ambos uniformados llegaron incesantemente para darle el último adiós a los policías abatidos. La tarde transcurrió entre abrazos, lágrimas y lamentos. Decenas de coronas mortuorias fueron llevadas por policías de diferentes unidades especiales.
"Dejen de joder, no maté a ningún policía", dijo un joven que fue señalado en las redes sociales
“Era una excelente persona y un gran compañero; siempre estaba atento a lo que necesitábamos. En la calle era un policía ‘pechador’ como pocos. No tenía problema en enfrentar cualquier situación. Tenía una gran vocación y sabía bien lo que significa llevar el uniforme. Hagan de cuenta que a esto lo vivimos en carne propia”, describió a Peralta un compañero de su época en Infantería.
“Él me decía siempre que iba a morir en la Policía”, aseguró la ex mujer de Peralta
“Es una pérdida irreparable para la familia y para la fuerza. Él tomaba muy en serio su trabajo. Él siempre usaba el chaleco; no sabemos qué pasó. Pero los delincuentes saben a dónde disparar y esa es la consecuencia que pagamos en la Policía”, expresó Leonardo Ángeli, concuñado de Peralta y empleado policial.
“No entendemos cómo sucedió esto, porque Cristian no se sacaba el chaleco antibalas ni para almorzar. Tampoco sabemos si el chaleco estaba en condiciones. Eso lo tiene que saber el personal de Logística. Evidentemente, este tipo no estaba limpio. Tenía un arma de grueso calibre que no la tiene cualquiera”, agregó.
Marcha
Ángeli contó que están preparando una marcha para hoy a las 19, frente a la Casa de Gobierno. “Lo hacemos por las familias de todos los policías. Queremos que detengan a esta persona y pague por lo que hizo”, concluyó.